miércoles, 14 de marzo de 2012

La Fotografia y el Arte

          El desarrollo tecnológico al que asiste la sociedad desde el s. XX como consecuencia de las sucesivas revoluciones industriales, y la propia autonomía que los lenguajes del arte experimentan casi al mismo tiempo, han ampliado extraordinariamente el campo del objeto artístico siendo por ello las múltiples manifestaciones que podemos considerar con total propiedad como obras de arte, además con sus propios lenguajes.

          Aquello que consideramos genéricamente como medios visuales de comunicación de masas, tiene dos características susceptibles de convertirlas en obras de arte dignas de ser historiadas. Por una parte su enorme impacto social y por otro, este mismo fenómeno las convierte en un hecho histórico singular de nuestro tiempo.A ello habría que añadir el valor de su calidad, la prueba de su importancia artística y de su reconocimiento es que nadie limita ya el mundo del arte solo a la arquitectura, la escritura o la pintura.

           Y por el contrario en los manuales de historia del arte aparecen ya en sus programas una variada selección de actividades vinculadas a los medios de comunicación de masas, entre los que podemos considerar mas importantes (al menos por su influencia social); el cartel, la fotografía, el cine, el comic y los lenguajes artísticos surgidos del medio televisivo, como la publicidad, los films, series televisivas e Internet y videos…

           La fotografía se invento gracias al desarrollo científico e industrial del comienzo del s.XIX. Su principal interés desde sus origines radican en su capacidad por reproducir la realidad con una fidelidad absoluta. La fotografía es el mejor testimonio de una existencia real ya que no hay edad para la fantasía, porque aquello reproducido es algo que ha estado delante de la cámara aunque en todo caso nunca habrá que olvidar, que la fotografía no es la realidad sino una reproducción de la realidad y por ellos podemos decir que se trata de una ilusión visual.

           En este sentido, la fotografía venia a alcanzar el sueño de cualquier pintor realista, porque desde el Renacimiento (s. XVI) hasta el Neoclasicismo (s.XIX) muchos habían sido los autores que habían experimentado con elementos de perspectiva o de composición, juegos de luces, todos ello para alcanzar la máxima variedad en sus representaciones.

           La fotografía desborda por completo estas aspiraciones y el mismo tiempo “liberaba” a la pintura de esta carga de ser testigo de la realidad. Esto contribuyo enormemente a la liberación formal del lenguaje pictórico. A pesar de todo la fotografía es una reproducción bidimensional como la pintura.

           Su procedimiento depende de la luz, de una cámara oscura y de un material que servirá de soporte, necesita ser sensible a los rayos luminosos. La figura reproducida se coloca delante de la cámara oscura en la que solo se abre un pequeño orificio para que la luz impresione en el soporte sensible dentro de la caja, donde quedara reproducida la imagen. Esta podrá variarse de tamaño y podrá manipularse aumentando y disminuyendo el foco de luz y por supuesto podrá ser repetida cuantas veces se quiera.

           El resultado desde el punto de vista artístico será una imagen bidimensional de cierta estética y monofocable. Esto mismo es lo que ocurría con la perspectiva geométrica en los inicios del Renacimiento Italiano. En su lenguaje se consideran además otros elementos que son comunes a la pintura como por ejemplo; el tratamiento de la luz, el tratamiento del color, la composición, etc. El origen de la fotografía, lo podemos retrasar al s. XVIII, cuando se descubrió que las sales de plata se oscurecían al exponerse a la luz. Ya en el s. XIX concretamente en 1822, Niepce realizo una primera fotografía con una cámara oscura y un soporte de yoduro de plata.

           Daguerre mas adelante dio origen al daguerrotipo al perfeccionar el sistema positivando sobre el papel. En 1861 aparece ya la 1º fotografía en soporte de papel, en la actualidad, las posibilidades de la fotografía artística son enormes, al utilizar todo tipo de recursos para la manipulación, bien en negativo o en positivo, y también, igualmente posible esta manipulación durante la ejecución de las fotografías, utilizando objetivos distintos, filtros, distintos tipos de película, papeles de distinta resolución y de distinta sensibilidad, reveladores diversos.

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